La Ciudad ha dado por apagado el tercer incendio forestal más grave de la historia de la ciudad al haber calcinado una superficie de entre 50 y 54 hectáreas de monte, dejando un balance de tres bomberos afectados por las llamas y la activación de un plan especial de emergencias.
En rueda de prensa, la consejera de Presidencia del Gobierno ceutí, Yolanda Bel, acompañada por el jefe del Servicio de Bomberos, Manuel Gentil, han destacado que el fuego es el tercero más grave por detrás del ocurrido en 1993 -que quemó 110 hectáreas- y otro de 1982 cuando ardieron unas 80 hectáreas.
El fuego se inició en la zona de García Aldave a las 14,30 horas de ayer y las llamas no han podido ser totalmente extinguidas hasta las 06,45 horas de esta mañana, aunque todavía permanece un retén de bomberos en la zona.
El fuerte viento de levante hizo que las llamas llegaran incluso hasta el perímetro fronterizo que separa Ceuta de Marruecos, ardiendo entre 50 y 54 hectáreas de monte en un espacio natural protegido de la Red Natura 2000 de un alto valor ecológico.
El fuego ha afectado a masas mixtas de pinos y eucaliptos así como matorrales autóctonos y exóticos así como, en menor medida, se han visto afectados los alcornocales, "hay el conjunto de la afección de la zona es de alto valor ecológico y una pérdida de gran consideración medioambiental", ha valorado Yolanda Bel.
Un total de 37 bomberos participaron en las labores de control de las llamas, siendo necesario emplear entre 600.000 y 700.000 litros de agua, sin contar el agua utilizada por los dos hidroaviones, cada uno de ellos con una capacidad de carga de 5.500 litros.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) llegó a Ceuta a las 02,00 horas de la madrugada en un barco procedente de Algeciras (Cádiz) para colaborar en la extinción del fuego. "El viento nos volvió locos ya que era un viento de levante variable", ha resaltado Manuel Gentil.
Por la experiencia del jefe de Bomberos, el fuego fue "intencionado" aunque ha precisado que "es muy difícil saberlo con exactitud", destacando que hubo sólo un foco. "El incendio está completamente apagado, sólo estamos repasando ya los rescoldos", ha apuntado Manuel Gentil.
Tres bomberos se vieron afectados por el incendio, uno de ellos fue trasladado al hospital por la caída encima de las ramas de un árbol, otro fue atendido por intoxicación de humo y un tercero tuvo que abandonar las labores por un dolor en el costado.
En la zona afectada, conocida como García Aldave, se encuentra un retén de bomberos que esta misma mañana ha tenido que apagar un pequeño foco cerca de la frontera. "La llegada de los hidroaviones fue fundamental ya que nos permitió pasar del nivel 2 de alerta al actual nivel 0", ha dicho el jefe de Bomberos.
La consejera Yolanda Bel ha valorado que ningún bombero solicitó ser relevado "cuando llevaban nueve horas de servicio" y que han estado "veinte horas ininterrumpidas trabajando, lo que evidencia que es un cuerpo implicado y dedicado".
Manuel Gentil ha señalado que el fuego podía haber sido "mucho más grave" de haber afectado a otra zona conocida como el Monte de la Tortuga, donde afortunadamente no llegaron las llamas.