
Tras un mayo negro en violencia machista, con los asesinatos de seis mujeres y un menor, nos enfrentamos a un panorama que este mes de junio ofrece una peor cara, si esto es posible. Ayer noche conocíamos que se ha recuperado el cadáver de una de las dos niñas secuestradas por su padreen Canarias, Olivia, y aún se está buscando a la pequeña Anna, de apenas un año. Y, por otra parte, el no menos doloroso asesinato de la menor Rocío en Sevilla, que deja además un bebé de cuatro meses huérfano. Una sola noche; tres víctimas más de esta violencia machista que no cesa.