El presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Juan Vivas, acompañado por el consejero de Fomento y Turismo, Alejandro Ramírez, y el consejero de Medio Ambiente, Yamal Dris, ha querido visitar la zona y conversar con los vecinos con el fin de trasladarles cómo está la situación, así como todo el apoyo del Ejecutivo local.
Vivas ha insistido en que era la obligación de la Ciudad visitar la zona para explicar a los vecinos la situación y asegurarles que “siempre se defenderá el interés general, y este es primero el de las personas más directamente afectadas, que son los vecinos que viven en las inmediaciones de la plaza, y el interés general de Ceuta, ya que esta es una obra también en beneficio de todos los ceutíes”, poniendo de manifiesto que “se han cumplido estrictamente con todos los procedimientos legales y por consiguiente tengo plena confianza en la justicia y confío en que esta suspensión se levante y las obras se reanuden cuanto antes”.
El presidente de la Ciudad Autónoma reconocía que este pronunciamiento judicial es un contratiempo, pero también quiso poner de manifiesto que la intención es la de continuar adelante con la ejecución de este proyecto de la Plaza Nicaragua y en el que se viene trabajando desde hace muchísimos años.
Vivas ha puesto de manifiesto que quieren ir de la mano de los vecinos, de los que ha dicho que “siempre hemos encontrado unas personas comprensivas que han entendido la situación y que han secundado las distintas actuaciones que se han llevado a cabo para resolver el asunto de manera satisfactoria”.
Vivas ha recordado que esta parcela no era propiedad de la Ciudad, y que la misma hubo que adquirirla a través de “un procedimiento muy complejo, pero también muy garantista desde el punto de vista del cumplimiento de la ley y de la defensa del interés general”.
El presidente de la Ciudad ha reconocido que durante este periodo de tiempo, tanto el consejero de Fomento y Turismo, Alejandro Ramírez, como él mismo, han mantenido contactos con la persona que ha solicitado la paralización de la obra, pero también reconocía que “sus pretensiones siempre han sido sometidas al criterio de los servicios jurídicos y técnicos de la Ciudad, ya que se está hablando de dinero público, y ese criterio siempre ha sido de que no procedía ningún tipo de indemnización en relación con lo que esta persona pretendía”, volviendo a insistir en que no procedía ningún tipo de indemnización porque “cuando la Ciudad adquiere la parcela y la construcción, lo hace libre de cargas y gravámenes”.
En cuanto a la indemnización solicitada por la persona que interpuso ese interdicto, el jefe del Ejecutivo local, que aseguró no conocer exactamente la cantidad, aunque la misma podría superar los 400.000 euros. Igualmente, Vivas ponía de manifiesto que esta persona lo que solicitaba era que no se demoliese la estructura que ahí había, estructura que compró la Ciudad y que ya se demolió, por lo que tal y como expuso Vivas “esto no tiene ningún sentido, y el único sentido que yo le veo es que trate de aprovecharse de una situación para sacarle dinero a la Ciudad, y eso no lo vamos a consentir”
Con respecto a la medida cautelar adoptada por el juez, Vivas aseguró, tras tildar de “incongruente” que la acción se plantee contra la empresa constructora y no contra la Ciudad que es la propietaria del inmueble, que la misma se va a cumplir, pero ya ha advertido que los servicios jurídicos de la Ciudad confían plenamente en que en la contestación para ese auto de paralización de la obra que se va a presentar, se levante esa suspensión y que las obras puedan terminarse en el plazo previsto.
Finalmente, en cuanto al estado actual de la obra, el presidente Vivas ponía de manifiesto que hasta el momento se ha llevado a cabo una labor importante de movimiento de tierras, para seguidamente proceder a acabar con el “boquete” que ahora mismo hay y así poder nivelar la que será la futura plaza y seguir con su ejecución.
Hay que recordar que estas obras se adjudicaron el pasado mes de abril, teniendo las mismas un plazo de ejecución de 12 meses, de los que ya se han consumido cinco, y ahora habrá que esperar a que se levante la paralización. Pese a todo, Vivas se mostró convencido que una vez se levante ese periodo de paralización, la ejecución total de la obra no excederá de los 7 meses.