Vox cerraba el pleno de este martes con una propuesta relativa a albergar un cementerio de animales, siendo esto inviable por las condiciones de suelo de Ceuta, según la consejera de Sanidad del Ejecutivo local, Nabila Benzina. Aun así, desde el PP ofrecían una transaccional a Vox en la que se promoverían las actuaciones necesarias para cumplir los requisitos, cubrir el servicio de incineración de mascotas que mueran en Ceuta y realizar campañas de información para los ceutíes.
Para los de Vox, la muerte de una macota es un “duro golpe, especialmente cuando se sabe que sus mascotas se trasladan fuera de su ciudad y que el protocolo es excesivamente frío”. Según Redondo, “los propietarios, al fallecer la mascota, la trasladan a las clínicas de la ciudad. El veterinario se pone en contacto con la empresa adjudicataria del servicio de recogida de animales fallecidos. Una vez los recoge del veterinario, los dejan en unos contenedores situados en su planta, manteniéndolo a temperaturas de congelación hasta su destino final, que por lo general es una planta incineradora en el territorio peninsular”.
Según la formación, “muchos ceutíes quieren tener la posibilidad de incinerar a sus mascotas o enterrarlos en Ceuta. Lo reclaman con campañas de recogida de firmas o denuncias vecinales en la prensa”. Benzina se acoge a la Ley 7/1985 en la que todos los municipios tienen la competencia para crear cementerios.
La consejera exponía que “en Ceuta, el reglamento de la policía sanitaria mortuoria de la ciudad dicta los requisitos. Uno de ellos, la distancia mínima en línea recta a zonas pobladas de mínimo 1.500 metros cuadrados. Aquí tenemos una problemática de suelo bastante considerable, además, los cementerios deben estar aislados… en caso que existiese una zona probable, debería ser estudiado por Medio Ambiente y Sanidad, pero siempre teniendo en cuenta las condiciones del suelo”.
Por ende, estudiarán la posibilidad de la implantación de un servicio de incineración de animales, con lo que se llevaría a cabo un correcto tratamiento de los restos biológicos. “Se eliminaría un problema sanitario y ambiental y se dignificaría la muerte del animal”, añadía. Una propuesta que salía adelante con 14 votos a favor y cinco en contra.