El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró este lunes que su objetivo es trabajar con "tranquilidad y serenidad" para "consolidar y hacer irreversible" la nueva relación con Marruecos, según informa hoy la agencia estatal EFE.
Así, en las negociaciones para la apertura de las aduanas de las ciudades españolas fronterizas de Ceuta y Melilla se va a trabajar "en un clima de tranquilidad y serenidad, conforme a la hoja de ruta que nos hemos fijado, para consolidarla y hacerla irreversible".
En una comparecencia en el Senado, el jefe de la diplomacia española destacó el plan acordado con Marruecos para abrir las fronteras, que ha incluido una segunda prueba efectuada el pasado 24 de febrero.
Esta segunda prueba es resultado "de un trabajo diplomático discreto y paciente" y consolidar una "frontera del siglo XXI" entre dos países vecinos que "deben tener las mejores relaciones de vecindad".
Albares indicó también que el semestre español de presidencia de la Unión Europea, a partir de julio, terminará con una cumbre euromediterránea para establecer un verdadero 'partenariado' en la región y la construcción de "un espacio de intereses comunes" sobre la migración, la energía o la seguridad alimentaria, según cuenta EFE.
Según el ministro español, "es muy importante" que la política sobre Marruecos sea una política de Estado: "Es casi una ley que uno debe tener las mejores relaciones posibles con los países con los que tiene fronteras comunes", concluyó.
Las relaciones bilaterales pasaron un período de crisis profunda de casi un año a cuenta de la hospitalización en España en abril de 2021 del líder del Frente Polisario, Brahim Gali; su organización reclama la independencia total del Sáhara Occidental, antigua provincia española ocupada por Marruecos en gran parte.
Marruecos respondió con una llegada masiva de migrantes irregulares desde su territorio a Ceuta, sin que las fuerzas de seguridad de ese país hicieran nada por evitarlo
La relación se encauzó tras la carta que envió el jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, al rey Mohamed VI en marzo de 2022, en la que consideraba la propuesta de autonomía presentada en 2007 por Marruecos sobre el conflicto del Sáhara como la base "más seria, creíble y realista" para resolverlo.
El pasado 2 de febrero se celebró una reunión de alto nivel en Rabat entre ambos Gobiernos, en la que se firmaron varios acuerdos.