Los vecinos de González de la Vega siguen sumidos en la incertidumbre de no saber qué va pasar con ellos tras el desalojo de sus viviendas, sin obtener ninguna respuesta del Gobierno y padeciendo situaciones que califican de “inhumanas”, como la que han tenido que vivir esta mañana.
El futuro de todas estas familias es incierto, menos el de Eloisa, una vecina del inmueble de 100 años, que en las primeras horas del día de hoy ha sido trasladada a la residencia Geron, a pesar de que hasta el último momento se negaba a abandonar su casa.
La sorpresa ha llegado justo después, cuando operarios de Obimace, que se encontraban en la calle esperando el traslado de la vecina, han intentado proceder al tapiado de la vivienda, en la que estaba un sobrino de Eloisa recogiendo sus enseres y efectos personales.Ante la negativa de los vecinos a que se sellara la puerta de la casa, el gerente de la empresa municipal, Gregorio García Castañeda, ha acudido al inmueble y ha paralizado el trabajo hasta que la familia pueda recoger todas las pertenencias de esta vecina.
Los vecinos de González de la Vega continúan con la desazón de la situación que están viviendo, las maneras en las que se ha intentado tapiar hoy la vivienda que acababa de desalojarse, y el miedo de llegar un día a sus casas y encontrar sus puertas tapiadas.