
Mucho se habla del estado de los centros educativos, de que no es competencia de la Ciudad y de que el Estado debe tener una mayor presencia en los servicios que son competencia suya, como es el caso en Educación y también en Sanidad.
Mucho se habla del estado de los centros educativos, de que no es competencia de la Ciudad y de que el Estado debe tener una mayor presencia en los servicios que son competencia suya, como es el caso en Educación y también en Sanidad.
La tragedia ocurrida en Marruecos ha dejado a todo el mundo conmocionado y, como no podía ser de otra manera, a los ciudadanos de Ceuta y Melilla, como consecuencia de su cercanía, también, pues estamos hablando del país vecino y más allá de unas relaciones que, evidentemente, podrían ser mucho mejores al estar siempre en el punto de mira ante las amenazas del país alaulita –el ejemplo más claro es la invasión permitida en mayo del 2021-.
El ‘Canty’ y el segundo detenido por los tiroteos en El Príncipe quedaban en libertad en la tarde de este jueves tras ser investigados por delitos de tenencia ilícita de armas y amenazas, debido a los disparos producidos durante la madrugada del lunes al martes en la barriada del Príncipe.
La situación que se está viviendo en Ceuta en los últimos años a nivel comercial y empresarial es digno de estudio y, por tanto, de análisis. No vale con pasar página y seguir el día a día sin hacer una reflexión acerca de lo que está sucediendo con la enorma fuga de empresas pioneras –las últimas fueron hace poco más de un mes Stradivarius y Mango-, mientras que el comercio local se va ahogando cada vez más como consecuencia de la actividad cada vez más muerta que existe en Ceuta y los numerosos obstáculos que se encuentran en el camino a pesar de los numerosos esfuerzos que vienen realizando desde hace décadas para mantener el negocio y a sus empleados.
Pasan los días, semanas y meses y parece que ya nadie se acuerda de Javier Guerrero, encarcelado como un criminal desde el segundo cero, mientras que hay muchos elementos que verdaderamente son un peligro público, deberían estar en la cárcel y continúan campando a sus anchas ya no solo por la ciudad, sino por el resto del territorio español.