El desmantelamiento sanitario se está produciendo prácticamente por todos los lados. Ya no solo están contentos los responsables de la Sanidad Pública con los continuos recortes que está provocando un importante daño al sistema sanitario, sino que cada vez es mayor el desabastecimiento de medicamentos, y medicamentos relevantes e importantes.
No se puede llegar a comprender cómo se juega de esta manera con la salud de las personas y con el único objetivo de recortar gastos.
Eso no se puede permitir, ya que el velar más por mantener la economía que por la salud de las personas debería sonrojar al más pintado, pero lo cierto es que, visto lo visto, los responsables de la Sanidad Pública tienen la cara más dura que el cemento armado y una poca vergüenza que es ya insultante.
La situación que se viene padeciendo con esta tremenda falta de medicamentos tiene que ser corregida de inmediato, no se puede permitir que haya personas que puedan ver expuestas a un riesgo innecesario su salud porque se esté produciendo este lamentable hecho.
Los responsables sanitarios deben tomar buena nota de esta situación y empezar a adoptar las medidas necesarias para que se revierta la situación de desabastecimiento de medicamentos existentes.
