Desde que hace más de quince días entraran en nuestra ciudad más de 10.000 inmigrantes de forma ilegal a través del espigón del Tarajal, los asentamientos ilegales han aumentado considerablemente en nuestra ciudad.
Aunque la Delegación ya ha confirmado que más de ocho mil de estos marroquíes que entraron de forma irregular ya han sido repatriados a su país, continúa habiendo cientos de inmigrantes que deambulan por la ciudad. La Ciudad y el CETI no son suficientes para albergar a todas estas personas o bien no quieren ser atendidos por los dispositivos que ambas administraciones tienen operativas y prefieren esconderse en los montes o en cualquier rincón para intentar pasar a la península.
La situación de estos inmigrantes se está volviendo cada vez más difícil ya que practican la mendicidad junto a los supermercados de la ciudad buscando limosna y comida y ya hay muchas personas mayores y niños que reciben el constante acoso de estas personas y tienen miedo a salir, como han confirmado varios ciudadanos a este medio.
Las autoridades deben seguir trabajando para evitar estas situaciones cuanto antes y desmantelar los asentamientos ilegales que hay en montes, jardines y edificios abandonados donde se resguardan estos inmigrantes, como el que muestra la fotografía en Loma Margarita.