Las autoridades marroquíes reforzaron su dispositivo de seguridad en las carreteras que conducen a la ciudad española de Ceuta y en las colinas cercanas a la urbe para evitar un nuevo asalto migratorio, y reforzaron también su presencia en las mismas vallas fronterizas.
Testigos oculares de la ciudad de Castillejos, vecina de Ceuta, informaron hoy a Efe de que las autoridades tomaron esas medidas después de la llegada a la población en el día de ayer de decenas de adolescentes procedentes de otras zonas del país que pretendían acceder de forma ilegal a la ciudad española.
Las fuentes agregaron que la policía estableció un nuevo puesto de control en el centro de la ciudad de Castillejos para impedir que los candidatos a la emigración pudieran llegar a los barrios más al norte de la localidad, desde donde salen las rutas que llevan a la frontera.
Asimismo, las fuentes agregaron que los servicios de seguridad, compuestos por la policía y las Fuerzas Auxiliares, impidieron durante la tarde de ayer la llegada a la población de taxis y autobuses procedentes de localidades cercanas.
Además, las fuerzas marroquíes duplicaron sus dispositivos cerca de las vallas fronterizas y en los bosques y las colinas en el lado marroquí de la frontera.