El presidente de la Ciudad y candidato a la reelección, Juan Vivas, volvía a comparecer en la jornada de ayer para hablar sobre un tema recurrente en los últimos días: el debate que no fue debate y la llamada a declarar de Kissy Chandiramani por la denuncia de su ex compañera de partido Susana Román.
Vivas insistió en que no hay motivo alguno que justifique ni el cese ni la dimisión de Chandiramani, al indicar que no tiene ninguna relación con el "caso Emvicesa" y que lo único que ha hecho es facilitar información a la policía y al juzgado correspondiente.
Pensamos que sí hay motivos y que Vivas le dijo a Kissy que lo hiciera y ahora no tiene la catadura moral para cesar a nadie, al igual que tampoco hizo en su día con Mabel Deu.
Kissy Chandiramani está investigada y existe un código ético que el PP tiene que cumplir. Al menos así debería ser pero no lo es.